Autismo infantil

Autismo en niños y chicos
El diagnóstico de autismo infantil
El "autismo infantil", como paradigma de las "psicosis infantiles", siempre ha ejercido una especie de fascinación sobre los psiquiatras de niños, desde que Kanner hizo en otoño de 1943, la brillante descripción de 11 niños que presentaban un conjunto de rasgos comportamentales a los que denominó: "Trastorno autístico del contacto afectivo".

En Viena, Asperger describió a principios de 1944 un cuadro semejante, al que coincidentemente denominó "psicopatía autista". (Para ser justos con la historia hay que señalar que se conocen descripciones de niños autistas en la literatura médica anteriores a estas fechas; aunque no fueron reconocidos como un síndrome).1

Esta coincidencia en designarlo con el término que Bleuler acuñó para la esquizofrenia en 1911, condujo a una confusión semántica y con el decursar de los años a una verdadera Torre de Babel.

¿Por qué se produce esta confusión respecto a los límites del síndrome?

En primer lugar por el sentido dado por Bleuler a la palabra autista: retirada activa al terreno de la fantasía del paciente esquizofrénico.

Esto producía confusión porque sugería "retirada de relaciones", cuando lo que Kanner realmente describió fue "incapacidad para establecer relaciones".

En segundo lugar, el término de Bleuler implicaba una rica vida fantástica, mientras que lo que las observaciones de Kanner indicaban era falta de imaginación.

En tercer lugar, el término establecía nexos con la esquizofrenia del adulto. Por tanto, esquizofrenia infantil, autismo y psicosis infantil se utilizaron como diagnósticos intercambiables.

Más aún, las observaciones posteriores de Kanner y Eisenberg en 1956, según las cuales el mismo síndrome puede verse después de un período de desarrollo aparentemente normal.

Seguir leyendo.
Fuente: http://bvs.sld.cu/